Yoga para niños

El Yoga es una práctica antigua que ayuda a crear salud y bienestar, construyendo conciencia, fuerza y flexibilidad tanto en la mente como en el cuerpo. Originario de la India, la palabra yoga significa ‘unión’, unión primero con uno mismo (el niño se encuentra con sí mismo, aprende a conocerse a sí mismo), y después con los demás (los pequeños aprenden a relacionarse y comunicarse con su entorno).

La práctica de yoga para niños se divide generalmente por grupos de edad, adaptando las actividades a las capacidades y necesidades de cada etapa.

Las clases se adaptan a la edad y el desarrollo de los niños, utilizando diferentes juegos, ejercicios y secuencias de yoga para mantener su interés y motivarlos a practicar. Para los más pequeños, se utilizan juegos y ejercicios adaptados a su edad, a menudo inspirados en el mundo animal o cuentos, mientras que para los mayores se introducen conceptos y prácticas más complejas, enfocándose en equilibrio, fuerza y control de la respiración, con actividades que fomentan la concentración y relajación.

La duración de las clases también se adapta, siendo más cortas para los niños de 4 a 6 años, de 30 minutos, y más largas, de 45 minutos, para los niños de 7 a 12.

En las clases de Yoga hay un equilibrio entre espontaneidad y estructura, de manera que los niños aprenden a escucharse mutuamente a la vez que aprenden a expresarse de forma creativa. Los niños aprenden mejor cuando se divierten, así que las clases llevan una mezcla de historias, canciones, juegos y posturas, permitiéndoles aprender en un entorno multisensorial. El Yoga es una forma divertida para los niños de desarrollar importantes habilidades en un entorno positivo, no competitivo.

A parte de los inmensos beneficios físicos y mentales, un principio central de la práctica es el respeto y el honor: por nosotros mismos, por el otro y por nuestro entorno.

Desde pequeños, los niños a menudo sienten la presión en el colegio, tanto a nivel social como a nivel académico, además de la presión de los deportes competitivos organizados. Es muy fácil volverse autocríticos y perder la confianza en ellos mismos cuando cambian y crecen. El Yoga es un gran remedio: no se forman opiniones en una clase de yoga, sobre cómo el niño hace una postura o realiza un juego. Hacer una postura “perfectamente” no es la meta del yoga, lo cual alimenta la fuerza interior y autoaceptación del niño. Esta atmósfera favorable para el desarrollo anima a los niños a relajarse y divertirse mientras que desarrollan no solo fuerza, coordinación, flexibilidad y equilibrio, también conciencia corporal, mejor atención y enfoque y autoconfianza.

BENEFICIOS

La práctica del yoga y del mindfulness es importante para los niños por muchas razones. Les ayuda a relajar, a aliviar el estrés y la ansiedad, a dormir mejor, y a mejorar el control emocional y sus estados de ánimo. Enseña a los niños a ser más conscientes, es decir, a ver las distintas situaciones y los pensamientos y emociones que les generan, desde una perspectiva más amplia.
● Mejora la memoria y el funcionamiento cognitivo: al practicar yoga los niños se concentran en la tarea que tienen entre manos, que se traduce en una mayor capacidad de enfoque y mejora del funcionamiento cognitivo en la escuela, lo que favorece un mejor rendimiento escolar.
● Favorece las relaciones sociales, favoreciendo valores y el compañerismo. La realización de yoga hace que los niños se muevan juntos y aprendan unos de otros, creando un entorno positivo y atractivo en la que los niños pueden divertirse, hablar entre ellos y aprender a confiar unos en otros.
● Ayuda a cultivar una mayor autoestima, autoconfianza y empatía en los niños, lo que se traduce en relaciones más positivas y abiertas.
● Regula las emociones: calma en situaciones de estrés y activa en situaciones de tristeza.
● Promueve la paciencia.
● Enseña a respirar y a concentrarse en momentos de tensión. Es una gran técnica de relajación.
● Refuerza la atención, concentración e imaginación.
● Mejora las habilidades de autorregulación.
● Ayuda a los niños a resolver problemas y adaptarse a nuevos desafíos, además de ayudar a alcanzar metas.
● Reduce el estrés y la ansiedad. Ayuda a liberar sus pensamientos y sentimientos negativos, a generar claridad mental y a sentirse mejor consigo mismo. El ejercicio físico libera endorfinas creando sensación de calma y felicidad.
● Mejora la postura y favorece el crecimiento equilibrado de músculos, huesos y articulaciones.
● Ayuda a mejorar el equilibrio físico.
● Trabaja la fuerza y la flexibilidad.
● Da agilidad y control de la fuerza en los movimientos.

ESTRUCTURA DE LA CLASE

1. SALUDO + RITUAL DE ENTRADA: serán juegos para conectar con el grupo. Al entrar en la sala nos quitaremos los zapatos y nos sentaremos en círculo. Pasando la campana e instrumentos para captar su atención a través de los sentidos.
2. CALENTAMIENTO: se realizarán ejercicios (Saludo al sol) y actividades para comenzar a conectar el cuerpo, nos pondremos gafas de Yoga (chin mudra) y empezaremos moviéndonos poco a poco. Se realizará por lo general en círculo.
3. JUEGOS DIVERTIDOS, PRÁCTICA DE POSTURAS (ASANAS): se seleccionarán un gran número de juegos para la práctica de posturas. Empezaremos con juegos que requieran mucho movimiento, para poder liberar y equilibrar la energía, y poder realizar bien, la parte más relajante de la clase.
4. JUEGOS DE RELAJACIÓN, MASAJES Y MEDITACIÓN: se seleccionarán juegos emocionales, cuentos, práctica de respiración y relajaciones guiadas. Nos ayudaremos con música de ambiente y con una luz tenue.
5. DESPEDIDA + RITUAL: se acabará la clase diciendo qué es lo que más nos ha gustado de la sesión, la repetición de un mantra, un dibujo, etc. Siempre se acabará en círculo cantando la canción/mantra que hemos propuesto en principio. Al salir del aula haremos limpieza de nuestro “Aura” pasando por dentro del aro, le echamos incienso o tocaremos la campana.

El yoga es una excelente disciplina para equilibrar nuestro cuerpo y mente, mediante posturas físicas, respiraciones, meditaciones y otras técnicas. Es el arte del equilibrio personal y la armonía espiritual. Es uno de los mejores instrumentos más idóneos y efectivos para cuidar el cuerpo y aquietar / relajar la mente, que nos ofrece la posibilidad de alcanzar un estado de bienestar y paz interior y un profundo respeto y conocimiento sobre nosotros mismos.

Es muy valioso que los niños comiencen a practicarlo desde temprana edad para establecer hábitos saludables y respetuosos con ellos mismos y con su entorno. La razón fundamental de este proyecto es ayudar a los niños a crecer felices y potenciar su autoestima manteniendo un equilibrio tanto físico, mental, emocional como espiritual (independiente de las creencias y religiones de cada individuo). En pro de una humanidad mejor.